Psicología del Superviviente

Hay una psicología para sobrevivir, En un ambiente de supervivencia se enfrenta mucho estrés que causa un impacto en la mente. Este estrés produce pensamientos y emociones que, si no se comprenden, pueden convertir a una persona bien preparada, en un individuo indeciso e ineficiente, con una cuestionable capacidad para sobrevivir.

Antes de que podamos entender nuestras reacciones psicológicas en una cuestión de supervivencia, es bueno saber un poco acerca del estrés.

El estrés no es una enfermedad que se cura y se elimina, es una condición que todos experimentamos. Puede ser descrito como nuestra reacción ante la presión.

Reacciones Naturales.

Miedo. Es la respuesta emocional a circunstancias peligrosas que creemos tienen el potencial de causar muerte, heridas o enfermedad. Éste daño no solo se limita a daño físico, la amenaza a la salud mental y emocional puede causar miedo. El miedo puede inmovilizar a una persona, dejarla tan asustada que fracasa al efectuar actividades esenciales para su supervivencia.

Ansiedad. Asociada al miedo esta la ansiedad, es natural para nosotros preocuparse, es también natural experimentar ansiedad. Puede ser un sentimiento aprehensivo cuando enfrentamos una situación peligrosa (Física, Mental y Emocional). Utilizada a favor, la ansiedad nos urge a terminar, o al menos dominar los peligros que amenazan nuestra existencia.

Frustración e Ira. La frustración surge cuando una persona es continuamente frustrada en sus intentos de alcanzar sus metas. El sobrevivir es permanecer vivo hasta que obtenga ayuda o la ayuda llegue hasta usted. Cuando ese sentimiento crece puede convertirse en Ira. Ambas alientan reacciones impulsivas, comportamiento irracional, decisiones sin pensar y en algunos casos, la actitud de “Renuncio”. Si no se enfoca bien estos sentimientos, se puede desperdiciar mucha energía que hacen poco para aumentar las posibilidades de sobrevivir.

Depresión. Es rara una persona que no se entristece, al menos de momento, cuando se enfrenta a la posibilidad de no sobrevivir. Si esta tristeza aumenta, se le llama depresión. Esta íntimamente ligada a la Frustración y la Ira. Cuando una persona se vuelve más y mas furiosa conforme falla en alcanzar su meta, la persona decae física, mental y emocionalmente. Cuando llega a este punto se da por vencido y cambia de “Que es lo que puedo hacer” a “No hay nada que pueda hacer”. La depresión es una expresión para este sentimiento de desamparo y desesperación.

Soledad y Aburrimiento. El hombre es un animal social, significa, que como seres humanos, disfrutamos de la compañía de otros, muy pocas personas quieren estar solas todo el tiempo. Esto no es malo, la soledad y el aburrimiento pueden sacar a flote cualidades que cree que solo otros poseen. Cuando se requiere se pueden descubrir habilidades y talentos ocultos. Se debe tener fe en su capacidad de “Andar solo”.


Culpa. Las circunstancias que llevan a ser un superviviente son a veces dramáticas y trágicas, Pueden ser el resultado de un accidente donde hubo pérdida de vidas, quizá es el único, sino de pocos en sobrevivir. Mientras que es natural sentir alivio de estar vivo, al mismo tiempo se aflige por aquellos que fueron menos afortunados. No es raro que los sobrevivientes sientan culpa de seguir vivos mientras que otros no. Este sentimiento, utilizado de manera positiva, ha impulsado a la gente a tratar más fuerte de sobrevivir con la creencia que siguen vivos por un propósito mayor.

Preparándose a si mismo.

Como puedes ver, vas a experimentar toda una gama de pensamientos y emociones, éstos pueden trabajar para ti, o pueden hacerte caer. No te preocupes de tus “Reacciones naturales a esta situación no natural”, prepárate a ti mismo a dominar estas reacciones para que te sirvan en tu interés, que es permanecer vivo.

Conócete a ti mismo. Refuerza tus mejores cualidades y desarrolla las áreas que te servirán para sobrevivir.

Anticípate al miedo. No pretendas no tener miedo, la meta no es eliminar el miedo, sino crear confianza en tus habilidades a pesar del miedo.

Se Realista. Ve las circunstancias como son, no como quieres que sean. Mantén tus esperanzas y expectativas dentro de lo estimado de la situación. “Espera lo mejor, Prepárate para lo peor”.

Adopta una actitud positiva. Aprende a ver lo bueno de cada cosa, eso no solo levanta la moral, es excelente para ejercitar la imaginación y la creatividad.

Recuerda lo que está en Juego. En juego está tu vida y la vida de aquellos que dependen de ti.

Entrena. Empieza a prepararte ahora para lidiar con los rigores de la supervivencia. Demostrar tus habilidades en el entrenamiento te da la confianza cuando las necesites. Recuerda, cuanto más realista sea el entrenamiento, menos intimidante será la situación real.

Aprende técnicas de manejo del Estrés. Las personas con estrés tienden a entrar en pánico si no están bien entrenados y preparados psicológicamente para enfrentar las circunstancias cualesquiera que sean. Aprendiendo éstas técnicas aumenta tu capacidad de permanecer en calma y concentrado en mantenerte y mantener a los otros vivos.